Ariosto Rivera desea revivir y preservar esta extraordinaria técnica prehispánica y así despertar la motivación para lograr su perfeccionamiento. Esta técnica se ha convertido en su medio de expresión. Su deseo es que cada persona pueda admirar y contemplar, cada color y cada milímetro de popotillo colocado en cada una de sus obras. Y que se aprenda que por muy pequeños que seamos, todos formamos parte de la gran obra maestra de arte llamada Vida.
Joaquín Ariosto García y Jesús P. Rivera, en su búsqueda por mantener vigente una técnica artesanal, heredada en su núcleo familiar, y practicada desde hace 20 años en el corazón de San Juan Teotihuacán, Estado de México, retoman este conocimiento y dan su propia reinterpretación del “Arte Popotillo”.
El “Arte Popotillo” es una técnica milenaria que surge en la época prehispánica de México. La técnica consiste en utilizar, finas y delgadas fibras de zacate llamado “popotillo”, como elemento principal para crear obras de arte figurativo. El “popotillo” proviene de la planta del “Mijo” (denominación botánica: Muhlenbergia quadridentata Kunth). El “popotillo” nace y crece en la falda de los volcanes del Popocatépetl, los llanos de Oaxaca, Cholula, etc.
El proceso para tratar el popotillo consiste en cortarlo, primordialmente durante el invierno, sacudirlo y limpiarlo in situ, para esparcir las semillas in situ y permitir que crezcan nuevamente. Posteriormente, se pone a secar durante varios días. Una vez seco, el popotillo se tiñe con anilinas y/o pinturas vegetales para crear popotillos en una amplia gama de colores y tonalidades.
Una vez teñidos, estos coloridos popotillos se colocan uno por uno y se pegan con cera de Campeche sobre el lienzo y así crear cada obra de arte, con una técnica milenaria.
En el año 2017, Joaquín y Jesús deciden unir sus talentos y crean su firma en coautoría, Ariosto Rivera. Su inspiración nace de la simbiosis entre la pasión por el arte y la herencia cultural mexicanas. Cada obra es un homenaje a su cultura y tradición mexicanas. Su obra invita a la reflexión y/o admiración del entorno y de lo que nos acontece en nuestras vidas.